Los deportes mueven masas y generan pasiones. Esta frase siempre la hemos escuchado y leído y es tan cierta como el aire que respiramos. El ámbito deportivo genera numerosas pasiones entre los aficionados y los deportistas, como todas las cosas tiene aspectos positivos de los cuales hablaré, pero también algunos aspectos negativos.
Todos nos hemos sentido orgullosos y felices cuando hemos visto a nuestro equipo o deportista favorito ganar un torneo, una copa, un combate... Esa sensación de felicidad que produce cuando ves que en el último minuto el balón entra en la canasta o que un golpe que sale de la desesperación aturde al rival y en ese momento suena la campana y todos salimos a celebrarlo, esto es algo inexplicable. En un país como en el que vivimos, en el que contamos con grandes deportistas y equipos estas sensaciones se viven a menudo (aunque no siempre son de felicidad).
El fútbol como deporte nacional es capaz de hacer que todo un país salga a la calle a celebrar un título mundial y que la gente se una por una misma causa. Llegué a ver gente que no le gustaba el fútbol salir a la calle y celebrar toda la noche el mundial. Yo cuando mi selección perdió viví la otra cara, la tristeza, la cara de la derrota cuando tu equipo es eliminado de esa competición, pero ya habrá ocasión de conseguirlo. Estas sensaciones de felicidades son las que más me gustan del deporte, en los aficionados nos produce orgullo sobre ese equipo o deportista y a los que lo practican es un logro personal haberlo conseguido después de tanta presión y tiempo entrenando para conseguirlo. Es algo desconocido para algunos y difícil de explicar para quienes lo han vivido. En el deporte siempre vemos rostros de alegría , de tristeza, algunos de amargura otros de dolor pero lo que sabemos es que cuando se gana todos somos felices.
En los deportes individuales como son el atletismo o deportes de contacto la presión recae sobre los hombros del deportista o luchador que tiene que dar su todo para ganar después de todo el sufrimiento pasado en el entrenamiento. Cuando un amigo o familiar gana una carrera o un combate la sensación es inigualable, es una sensación de superioridad que se puede mal interpretar y que algunos llevan mal y se ríen del rival o no tienen el respeto que se debería, esto es un aspecto negativo de esto. En Thailandia por ejemplo el Muay Thai es un deporte como para nosotros el fútbol, allí los niños entran a pelear con 5 años y aparte de ser solo deporte involucra muchas cosas como la religión y la disciplina, ya que para ellos es algo casi sagrado.
También destacaría el ejemplo que los deportistas dan a los fans ya que gracias a ellos la gente empieza a hacer deporte y a importarse por su desarrollo físico, no todos pero es algo que también hace que la gente se empiece a mover y que intente aunque sea hacer deporte por diversión y no solo por competición o con objetivos estéticos.
Hay algo más detrás de todo esto ya que siempre que hablamos de deporte hablamos también de dinero. Siempre hay gente por detrás aprovechándose de todo esto, siempre alguien saca beneficio. Cuando hablamos de que el deporte mueve masas y pasiones deberíamos incluir que también mueve millones debido a que siempre hay uno intentando sacar provecho del deporte, ya sea en el fútbol como donde es más común en el boxeo, donde el mundo de las mafias y los amaños deportivos están muy presentes.
Otro aspecto es el del fanatismo ya que muchas veces se confunde la pasión del deporte con el fanatismo y la obsesión ciega por algún deportista o equipo. Esto hace que la gente se obsesione con una cosa y no sea capaz de mirar más allá de su equipo o ídolo haya actuado bien o haya actuado mal. Para mí esto es algo que no se puede cambiar puesto que cada uno es como es y la gente que es fanática no se le puede hacer cambiar de opinión, pero sí que debemos educar para hacer distinguir a los demás la diferencia entre pasión y fanatismo.
Por último me gustaría agregar que la pasión por un deporte o por los deportistas que lo realizan es un lazo muy fuerte ya que en mi caso, mi pasión es el culturismo y el mundo del fitness, yo cada vez que voy a entrenar o cada vez que estoy leyendo algo sobre lo que me gusta e incluso cuando en una película o serie sale algo sobre este tema, se despierta en mí una chispa que me hace sonreír por dentro ya que es algo que vivo y me encanta como a otros el fútbol, el rugby o el baloncesto. La pasión por el deporte nace en una persona a medida que crece y no todos la poseen pero es algo que me parece precioso y una sensación inexplicable.
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